Nos llevamos más de lo que traemos.

Llegamos a la Fundación "Carmen Castro Padilla". Está ubicada en medio de un paraje rodeado de vegetación. Es un lugar bien tranquilo al que los niños llegan caminando cada día...solos. Intentan ir en grupos.
A nuestra llegada los niños nos reciben con alegría, nos estaban esperando y saben que llevamos regalos, Je,Je.
En estas situaciones siempre me pasa lo mismo
Primero me siento observado, y segundo me siento mal por hacer fotos y grabar en vídeo... siento que me llevo algo que no me pertenece.
Nos recibe la directora del centro, es una muchacha joven de unos 26/27 años que lleva trabajando aquí unos 7 años. Es encantadora, y apenas recibe unos "Cordobas" como compensación.
Se reunen todos en el patio para recibirnos y para participar en los juegos que vamos a organizar.
Al principio todos estamos algo cortados, pero poco a poco vamos perdiendo la timidez...
Jugamos al juego de la silla, organizamos un concurso de baile ( impresionante como mueven el cuerpo estos enanos), y finalmente como fin de fiesta "La rifa".
Jaime reparte un número a cada uno, y cada número corresponde un juguete.
! Sus caritas lo dicen todo ! a la mayoría les encantan sus regalos, sólo a algunos a los que les tocan premios menores, se les tuerce un poco el gesto... pero inmediatamente comienzan los "trueques" y todos felices.
Todos estos niños pertenecen a familias desestructuradas, y la mayoría de sus familias no se preocupan por su educación, alimentación o higiene.
Tienen un punto de madurez que nada tiene que ver con los niños de su edad del primer mundo.
Muchos de ellos con sólo 8 o 9 años tienen que hacerse cargo de dos o tres hermanos pequeños , y de la casa, mientras regresan sus padres a la casa.
Me quedo como siempre con lo positivo. Hemos pasado una tarde fabulosa, hemos jugado, nos hemos reído, hemos hecho regalos, y al menos durante unas horas todos nos hemos evadido... ellos de sus carencias, y nosotros de nuestras necesidades creadas.
Finalizan la tarde como todos los días ,con una oración, agradeciendo a un Dios que les tiene un poco olvidados... Será que tiene mucho trabajo ;D.
Hay millones de niños como estos en todo el mundo. Pero al menos hoy hemos podido ayudar en algo a estos 50. Siempre merece la pena.
Nos llevamos la maleta vacía y el alma llena...

De camino al orfanato.

Son las 15:30 horas, acabamos de comer y nos ponemos en marcha para visitar el orfanato con el que colabora habitualmente Carolina (mi sobrina).
Caminamos algo más de 10 minutos desde la casa, atravesamos un pequeño río, una pradera con vacas, y llegamos a un sendero con selva a ambos lados.
Aparece una finca perfectamente vallada con una vivienda y con un par de edificios auxiliares donde se da servicio a niños de la calle de Managua de entre 6 y 12 años.
Es lo que conoceríamos en España como un centro de día. A él acuden diariamente de lunes a sábado unos 50 niños para comer, hacer sus tareas, recibir capacitaciones impartidas por voluntarios, algo de higiene, y una merienda de leche con cereales...para algunos es todo lo que van a comer hasta el día siguiente.
Hemos traído una maleta desde España con ropa y con muchos juguetes.
Promete ser una tarde emocionante.

El centro social.

Continuamos con la visita, Don José nos relata orgulloso (no es para menos) los logros y avances que van consiguiendo para este lugar, de la mano de ONG,s, agencias de cooperación, y donaciones varias.

Caminamos durante unos 10 minutos en dirección al centro social del cual está muy orgulloso.

Mientras caminamos la gente nos observa, somos un grupo de siete personas blancas y con pinta de turistas, cámaras, mochilas,....me siento raro.

Salimos de las calles y llegamos a un pequeño cerrillo, en lo alto el centro social del asentamiento.

Es una de las casas que construye el techo, pintada con los colores de la bandera Nicaragüense. Esta rodeada de una pequeña alambrada, y en el jardín se encuentra un hombre cortando la hierba con un machete gigante.

Entramos en la cabañita, aún se aprecian los restos de la última celebración de un cumpleaños infantil.

A la derecha una estantería con unos 40 libros. "Es la biblioteca" comenta Don José.

Por la ventana las vistas son espectaculares hacia el lago de Managua. Corre una brisa fresca.

A pesar de la sencillez , el lugar es acogedor, y tiene ese aire especial que tienen los edificios "oficiales"

Es el Centro Social del asentamiento. (con mayusculas)

Fin de esta visita.

En los próximos días visitaremos un Orfanato con el que colabora Carolina, hemos traído juguetes y ropa desde España.

Será emocionante.

Gracias Federico y al Techo por permitirnos conocer de primera mano su labor. Y gracias a Don José y a los pobladores de este lugar por dejarnos compartir su realidad.

Nuestro respeto y nuestros mejores deseos para ellos.

No me acostumbraré nunca...

Por mas veces que uno pueda visitar estos lugares, cuesta acostumbrarse.
Vamos circulando por una calle empinada, a ambos lados pequeños locales " Vulcanizados" (lugares donde se arreglan pinchazos), "Pulperías" (Casas particulares donde se puede encontrar desde un litro de leche , hasta una recarga de Movistar).
Enseguida sabemos que estamos llegando, el asfalto desaparece bajo nuestros pies y nos adentramos en un camino lleno de "Hoyos" (Baches), y de torrentes de agua de las lluvias tropicales (Estamos en invierno y llueve torrencialmente a diario).
Aparcamos junto a una choza , y Fede nos dice que aguardemos. Va en busca de Don José , uno de los líderes del asentamiento.
Regresa con Don José , un hombre de unos 48 años, con cara de buena gente. Es un señor encantador que nos brinda toda su hospitalidad, aprieta la mano con fuerza y mira a los ojos... ! Me gusta!.
Saluda con afecto y con cariño a todo el grupo, incluidos los niños. Caminamos por las calles llenas de barro agua y basura.
Este lugar tiene mejor aspecto que el asentamiento de Lima, hay menos basura, y al estar las casas construidas sobre terreno plano y entre la vegetación (Inexistente en el de Lima), todo tiene un aspecto algo mas ordenado.
De la mano de Don José pedimos permiso a una señora (propietaria de una de las ultimas casas construidas con la colaboración del techo) para poder visitar su casa.
La señora amablemente nos invita a pasar, está con sus 5 nietecitos en la puerta de la casa, justo en este momento están en el momento de la ducha, todos desnuditos, correteando por su patio, empapados en el agua que les lanza su abuela.
Visitamos la casa y nos relata desde cuando está viviendo allá, lo mucho que agradece al Techo su ayuda, se la ve contenta y satisfecha. A pesar de carecer de lo más elemental, se la ve feliz.
Lección de vida.
Nos hacemos unas fotos con ellos y continuamos con la visita.
No os puedo describir la mirada de mis hijos, están sorprendidos, pero perfectamente adaptados al entorno.
(esta entrada relata la visita del 6 de agosto, pero por problemas de comunicaciones durante el viaje no la he podido publicar antes).
Continuará...

Un Techo para Nicaragua.

Son las 9 de la mañana, y no9s acercamos a nuestra cita con los Techeros Nicaragüenses con Federico Barrios a la cabeza.

Entramos en una de las zonas residenciales de Managua, lo que se conoce como el "nuevo centro de Managua".

Después del terremoto de los 70, la ciudad quedó debastada por completo, y se ha construido poco a poco una nueva Managua, junto a la vieja.

Justo antes de llegar a las oficinas del Techo acá, pasamos por delante del único edificio de oficinas con más de 6 plantas que hay en Managua. Me cuenta Carolina que es propiedad de una familia muy poderosa en Nicaragua que además de tener bancos y terrenos ,son los propietarios del Ron Nicaragüense por excelencia , el "Flor de Caña". Esta familia se apellida "Pelas", Ja,ja,Ja...

Llegamos frente a la oficina del techo, una casa baja en una calle tranquila rodeada de viviendas y otras oficinas.

Nos encontramos allá con Federico (Director Ejecutivo del Techo en Nicaragua), como el resto de compañeros del techo, Federico está muy involucrado en el proyecto, es Joven(apenas 22,23 años) nos presenta a dos de sus compañeras que se encuentran también en la oficina.

Podemos comprobar junto a ellos los restos de las últimas campañas llevadas acabo, las herramientas de las últimas construcciones, las huchas (en forma de casita) con las que realizan las grandes colectas universitarias.

Nos ponemos en marcha para ir a visitar uno de los asentamientos en los que se está trabajando desde el 2008.

Vamos camino del asentamiento del "30 de Mayo".

Al montarnos en el coche preguntamos a Fede si estamos lejos, y nos contesta : " apenas 10 minutos del centro".... Los contrastes de este bello continente.

Wild,Wild, Nica.

Acabo de cumplir mis primeras 24 horas en Managua, inclasificable.
Pensé que después de Lima no encontraría una ciudad más desordenada y caótica.... Me equivoqué, Managua es aún más desordenada.
Para los ojos de un europeo, acostumbrado a calles bien asfaltadas, señalizadas, relativamente limpias, todo se antoja caótico y desordenado....pero encantador.
La vegetación en toda la ciudad es verde ,intensa y exhuberante, las calles están llenas de gente que camina, gente que maneja en bicicleta, en moto, en "burro", en Carro,... cualquier medio es válido para desplazarse acá.
Ciudad encantadora y encantada.
Disfrutando muchísimo de mi familia.
Mañana a las 9:00 hemos quedado con los "Techeros" de Nicaragua, vamos a visitar un asentamiento humano, ya os contaré.
Me encuentro en el porche de la casa rodeado de mil sonidos animales, a 50 metros del condominio; selva centroamericana, ¡ Que gozada !
Agur

Con los preparativos...

Mañana es el día "D", estamos nerviosos por iniciar ya este viaje multi-objetivo.

Vacaciones a un lugar exótico?, Vacaciones de aventura?, Turismo Solidario?...o visita a la familia?. Cualquiera de estos cuatro descriptivos le pueden encajar a este nuevo viaje que hemos emprendido. Sí digo bien. Lo hemos emprendido en el mismo momento en el que tomamos la decisión de realizar este fantástico viaje al corazón de Centroamérica.

Hoy ya estamos un poco mas cerca, ¡Ya tenemos las maletas!