Desgarradora despedida...

Momentos de compartir, todos hablamos con todos, nos contamos los detalles del día, se nos ve nerviosos, esto toca a su fin, comienzan las despedidas, y ahora sí que aparecen las lágrimas ya sin ningún pudor.

Intercambio de mails, promesas bienintencionadas de no perder el contacto, de pasarnos las fotos.

A nuestros compañeros peruanos , los veremos el lunes en la cena de integración en la Chifa.

A la gente "del techo" no la volveremos a ver, excepto a Pía y quizás a Elsie en la cena de esta noche.

Y a las familias... quien sabe.

Abrazos llenos de afecto, besos, ... lo peor ... los niños.

Nos subimos al bus, y comienza la partida. Decenas de niños nos siguen cuesta abajo, rodeando el autobús, sus caras son felices, se despiden con la mano, gritan ríen, en el interior del autobús...el silencio.

Nos hemos quedado sin palabras, durante el trayecto hasta el hotel, no se escucha nada, el silencio solo se ve alterado por el sonido ya familiar del claxon de los taxis en los interminables atascos de Lima.

!desgarrador!